El Servicio de Urología del departamento de salud Arnau-Llíria ha puesto en marcha la implantación de un novedoso dispositivo llamado Urolift para el tratamiento de pacientes con hiperplasia benigna de próstata (HBP) que consiste en un dispositivo aplicador y un implante permanente.

El implante es colocado de forma endoscópica sin necesidad de corte ni resección de tejido, y actúa como una cortina que se abre sujetada por lazos, sujetando el tejido de los lóbulos de la próstata agrandada, dejándola abierta para aliviar la obstrucción.

Se trata de una cirugía mínimamente invasiva que se realiza con anestesia local y sedación, en régimen ambulatorio, por lo que no requiere ingreso hospitalario, permitiendo a los pacientes una rápida recuperación, abandonando su medicación para la HBP y evitando la cirugía mayor.

Así pues, los pacientes pueden experimentar "un alivio rápido" de los síntomas, recuperarse rápidamente tras el procedimiento y volver a la rutina normal con un tiempo de inactividad mínimo, en cuestión de días, según las mismas fuentes.

El Hospital Arnau de Vilanova es uno de los primeros hospitales de España en incorporar esta técnica en su cartera de servicios. En todo el mundo se ha tratado a más de 300.000 hombres con el sistema Urolift.